Una frase difícil de decir: Me quiero

Una vez más te propongo el visionado de un vídeo de algo más de 4 minutos, garantizándote que no te dejará indiferente. Después sigue leyendo:

Contéstate de forma sincera a las siguientes preguntas, teniendo en cuenta que estas con la persona más valiosa para ti: Tú

• ¿Qué relación ves entre el hombre del vídeo y tu?
• ¿En qué grado te valoras?
• ¿Qué hace que ese sea tu valor para ti?
• ¿Cuál querrías que fuera?

Son preguntas sencillas pero no simples, fáciles de hacer y difíciles de responder. Demasiadas veces nos valoramos poco.

Cada día veo personas de gran valía cuya percepción de sí mismos es baja o muy baja, algunas de ellas, tras una coraza de irascibilidad o poder, otras escondiéndose tras el reproche a sí mismas o a otras y, por fin, las que ni tan siquiera tienen fuerzas para mostrar otra cosa que no sea su lado oculto.

¿Qué es lo que hace que alguien llegue al punto de no valorarse, que permita que otros se erijan en jueces de su valía y verdugos de su autoestima?

Todos nosotros, todos y cada uno, tenemos un brillante en nuestro interior, un brillante que hay que sacar a la luz y pulir. Suele estar tras muchas capas de creencias tóxicas, justo junto al pozo de nuestra mezquindad, pero está ahí, dispuesto a ser rescatado.

Ahora, mírate al espejo, ¿qué ves?. Mira más allá de tus ojos, mira en tu interior, en tu esencia y busca esa belleza que merece ser amada. Y ahora, ¿qué ves?

Nuestra grandeza solo podrá salir en el momento en que la reconozcamos como tal. He trabajado con muchas grandes personas que se veían como apenas seres humanos…hasta que se dieron permiso para mirar en su interior, para apreciar más su voz interior que la voz exterior, y entonces ellos mismos se empoderaron para ser lo que son: grandes personas.

Mírate al espejo, ¿Qué ves?