Los peces y el pescador

Aprendiendo a pescarRecordando antiguas batallitas de consultor, me venía a la cabeza la del excelente Director de Producción que puso por delante el objetivo a largo plazo sobre el cortoplacismo, costándole ello el puesto y, partiendo de ahí, me ha surgido una pequeña historia.

En una pequeña aldea de cualquier país del mundo, existían 2 grandes pescadores, y es que en aquel lugar, no habían animales terrestres salvo el hombre y poco más. Durante años, ambos había provisto de pesca a la gente del lugar pero el tiempo pasaba y uno de ellos se daba cuenta de que pronto morirían y, con ellos, el resto de la gente ya que no tendrían medio alguno de subsistencia.

Hubo una asamblea y se decidió que cada uno de los pescadores, lideraría un grupo de lugareños. El primero, observó durante algún tiempo a sus compañeros y se fue fijando en sus habilidades y competencias naturales para, después, enseñarles a todos en función de las mismas, lo cual hizo que durante mucho meses, estuvieran trabajando de sol a sol.

El segundo, necesitado del reconocimiento y la imprescindibilidad, se dedicaba a colocar los cebos en lugares que solo él conocía y a dar de comer a sus subordinados, que de tal modo les llamaba, puesto que estaban a sus ordenes.

Los del segundo grupo, pasaban la jornada riendo y jugando, mientras los primeros se esforzaban por aprender el arte de la pesca y, viendo esto, empezaron a burlarse de ellos, diciéndoles cosas como –ya podéis trabajar, ya, que vuestro pescador es un holgazán y lo único que quiere es haceros trabajar–

Oyendo esto, el primer pescador, les hizo ver la necesidad de saber obtener los recursos, puesto que él se acercaba a su fin, por lo que no hicieron el más mínimo caso.

Pasaron los meses y, como el imperio romano, el segundo grupo iba de fiesta en fiesta, sin tener en cuenta el paso del tiempo… hasta que un buen día, encontraron muertos a los dos pescadores.

Los primeros, lloraron a su maestro y salieron a pescar mientras, los segundos, siguieron con su fiesta ya que apenas conocían a su líder, que tan solo les proveía de recursos.

Una semana más tarde, uno de los grupos estaba cenando alrededor del fuego, asando los peces que habían obtenido ese día, pero el otro, solo podía mirar y maldecir su falta de conocimiento, ¿adivinas cuál es cada grupo?

¿Nos conformamos con recoger los peces que nos dan o empezamos a aprender cómo obtenerlos?

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