Ilusión como combustible del equipo
Por Jordi Vilá
¿Cuál es la principal fuente de motivación? ¿cuál es la mayor fuerza que puede mover a un colectivo?, desde estas líneas me atrevo a afirmar que la ilusión es el principal agente motivador y que, por más que la ilusión individual mueva montañas, la ilusión de un grupo, mueve cordilleras enteras.
Visualizar ese futuro, ese reto ilusionante en pos del cual todas las personas involucradas quieren ir, es el principio del final de un sueño y el inicio de la consecución de un objetivo, ya que al fin y al cabo, es tan solo el horizonte temporal el que separa uno de otro.
He participado en múltiples equipos y, el principal elemento en el éxito, ha sido utilizar la ilusión como principal combustible, y es que desde esa emoción, todo se torna posibilidad, si no tenemos los recursos, sabremos dónde encontrarlos, si no tenemos el tiempo, sabremos de dónde sacarlo, si no tenemos los conocimientos, sabremos quién nos los proporcionará.
Como líderes de un sistema, mantener abonado el campo de la ilusión a fin de no provocar la desesperanza y tener una actuación coherente, haciendo aquello que decimos y diciendo aquello que pensamos, deviene condición imprescindible del éxito , porque mantener la llama prendida es la principal función del líder.
Serán también necesarios el esfuerzo, la confianza y la valentía, los cuales no existirían sin los dos requisitos previos.
Vemos continuamente grupos de personas que consiguen alcanzar grandes hitos y las mencionadas son características comunes a todos ellos.
¿Nos paramos a pensar que es necesario para construir esos vínculos?, cuando he participado en uno de ellos o he tenido el privilegio de acompañarlos, he podido ver que había un objetivo común, aún y cuando las posturas fueran diferentes, existía flexibilidad para encontrar los puntos de unión más que las diferencias y, para eso, una gran humildad y respeto por los demás.
…Cuando eso sucede, vemos como el miedo se diluye y se torna confianza, ¿dispuestos para el viaje?