Hoy celebro la segunda oportunidad
Por Jordi Vilá
A las 05,30h. ha sonado el despertador. como cada mañana aunque, a fuer de ser sincero, debo reconocer que hoy había algo distinto, una noche pasada de forma inquieta, con aquel sueño de vigilia que te da la sensación de apenas haber dormido cuando, lo más seguro, es que lo haya hecho, si no a pierna suelta, sí por lo menos con ojos cerrados.
Esto me ha hecho empezar la jornada profundamente reflexivo y con cierto malestar, aunque esa reflexión me ha llevado a pensar que dentro de pocos días van a cumplirse 15 años desde que el destino me dio una nueva oportunidad, un renacer, una segunda vida…llamémosle como queramos, pero el hecho es que en lugar de llegar a la estación de término, se me permitió seguir viaje con todas las garantías.
Escribo estas líneas porque, aunque siempre he sido consciente de la tremenda suerte que me fue dada, me he dado cuenta de que no lo era plenamente, con toda la trascendencia que ello implica.
Mis pensamientos me han llevado a contrastar que, cuando he abierto los ojos, todos los sistemas se han puesto en marcha, unos de forma consciente y otros inconsciente. Mis ojos se han abierto, mis músculos se han tensado, mis pensamientos se encadenaban con la lógica de la normalidad (que no de cordura porque, ¿qué es cordura?)…en definitiva, que todos mis sistemas corporales se activaban con plena normalidad.
Por otro lado, veía a mi familia durmiendo, con ese dormir tranquilo, plácido; los miraba y pensaba, ahí sí, en lo bien que escogí y en los resultados, ya palpables, de una educación formal y emocional a los míos, no sin los vaivenes que nos trae el destino, pero con la plenitud que otorga el ver el resultado de la labor educativa.
Por otro lado, pensaba en que más que trabajar, me dedico a mi pasión, que no es otra que la de acompañar peregrinos, solos o en equipo, a uno de los caminos más trascendentes que emprenderán jamás: ellos mismos, transitando sendas que quizás no pisarían, saliendo de su esencia para poder crecer en ella.
Después de todas estas reflexiones, me he dado cuenta de que no había agradecido lo suficiente esa oportunidad que me fue dada hace 15 años, bueno, lo será de aquí a unos días y, con ese pensamiento, me he sentado al teclado. Quería compartir estos pensamientos, consciente de que quizás alguna de las personas de las que me lea, esté en una situación similar.
Tenemos la suerte de haber despertado en el día de hoy, ¿mañana?, no lo se pero, de momento, disfrutemos del hoy, del ahora, que mañana esta por venir….o no.
¿Cómo disfrutarás el día de hoy?