Gestionando equipos en remoto
Por Jordi Vilá
Lo que estamos viviendo es un auténtico tsunami, se inició en Asia y hemos podido ver como iba llegando a todo el mundo, de este a oeste, sin que pudiéramos pensar que los augurios apocalípticos pudieran ser ciertos.
…Y lo fueron, y así pudimos ver como el contagio a todos los niveles es una realidad y vemos como nos cambió el trabajo de la noche a la mañana, el mundo VUCA se corporalizó en forma de pandemia, llevando a la práctica totalidad de organizaciones a lo que se ha dado en llamar teletrabajo.
Resultó que el teletrabajo no era ni más ni menos que hacer lo mismo que en la oficina pero en casa, sin darle tiempo a nadie para prepararse, ni organizaciones, ni managers ni, por supuesto, empleados.
Los resultados han sido bien desiguales, desde aquellos equipos en los que ha mejorado la comunicación y sus relaciones interpersonales, hasta aquellos en los que ha habido dejación, en los que las personas se han sentido abandonadas, controladas, sin una mínima atención por sus necesidades más básicas, ya fueran físicas o emocionales.
Un artículo aparecido en el periódico 5 días desvelaba que la compañía SIEMENS pasará a un buen número de trabajadores al trabajo en remoto entre el 40 y el 60% del tiempo, algo que requiere de una confianza contrastada por parte de los managers, así como de una adecuación del puesto de trabajo.
En esta nueva etapa no hay lugar para el control a través del micro management, no hay lugar para el presencialismo y sí para la confianza y la orientación a los resultados, no al horario que pasa una persona realizando una labores que, las más de las veces, son asíncronas y, por tanto, pueden ser realizadas a cualquier hora.
En la charla que dábamos el pasado 16 de julio en la Quality Leadership University de Panamá, proponíamos algunos tips para los líderes de los equipos que trabajan en remoto (teletrabajan):
- Conoce bien las necesidades de tus colaboradores, eso será la garantía de éxito.
- Confía en tu equipo, no les agobies y tampoco les dejes solos, cada uno es singular y único y necesita un liderazgo diferente, no hay nada más injusto que tratar igual a personas diferentes.
- Dedica un tiempo a hablar de aspectos que no sean trabajo, ves forjando lazos de confianza y complicidad.
- Reconoce su esfuerzo y dedicación.
- Organiza encuentros virtuales entre todos los miembros del equipo.
- Vigila las diferencias horarias.
- Marca límites claros.
Son solo algunas ideas fruto de la experiencia, ya nos contarás que tal han funcionado.
¿Preparado para liderar en remoto?