Creer en mi

Sé que hay multiplicidad de seres en mi, unos más fuertes y arrolladores, otros más vulnerables y taimados, todos formando parte de una unicidad llamada Yo, todos coexistiendo, una veces gobernando unos y otra otros, porque al final el gobierno es de esa esencia que se permite unas u otras veleidades.

Me daba cuenta de todo ello cuando contrastaba como podía ser la persona más resolutiva y confiada en unos momentos para, en otros, dejarme vencer por miedos y apatía.

¿La diferencia?, tan solo la confianza en mi mismo y mis posibilidades, teniendo en cuenta que la realidad es tan solo una, tan válida para un estado como para el otro. Ahí vi que realmente podía ser el propietario de mis estados.

Ni nunca he sido tan maravilloso ni nunca he sido tan desastre, posiblemente esté en el punto medio entre ambos, y pueda ser tanto ángel como demonio.

Y es curioso que tan solo depende del convencimiento que tenga en mis posibilidades, solo eso. Si creo que puedo tendré razón, si creo que no puedo, también la tendré, porque me condicionaré en uno u otro sentido.

Me he visto a mi mismo, y también he visto a grandes personas, llenas de fortalezas, venirse abajo, temerosas de ellas mismas, descreídas de sus recursos y habilidades, como las he visto expandirse como un gas en libertad, cuando han confiado plenamente en ellas mismas.

¿Qué necesito para creen en mí mismo? ¿cuál podría ser la receta?. Cada vez me doy más cuenta de lo efímero de las cosas y, a mayor relatividad, mayor consciencia de mi mismo, de mi potencial inexplorado.

En lugar de pensar en el yo oscuro, he decidido sacar a pasear el yo luminoso, y hacer porque sea él quien gobierne la nave, ¿las consecuencias?, permitirme Ser e ir en pos de aquello que anhelo, sin más…y sin menos.

¿Probamos?